La historia de Tomero Cosecha Invernal 2013 de Bodega Vistalba – lo más nuevo de la bodega- es hermosa. Cuenta Alejandro Cánovas, su winemaker, que cuando fueron a buscar el Semillón para elaborar el vino más dulce que tiene la bodega, en pleno frío del invierno, con las manos heladas y las uvas pasas por las impiadosas heladas, se encontraron con que las palomas se habían comido todo el cuartel. Por fortuna habían dejado 2 cuarteles de Chardonnay, Viognier y Sauvignon Blanc intactos con el que pudieron elaborar el vino! Así lo llevaron a la prensa; la concentración de azúcar era tanta que por cada litro de vino tuvieron que utilizar 4 kg de uva. Estos cosecha invernal fermentan en barrica durante 2 años, la biología a través de las levaduras y las enzimas realiza sola su trabajo durante ese tiempo, dando origen a un elíxir de excelente concentración y delicados aromas: en nariz, se percibe la miel, la ambrosía, las frutas blancas, como damascos y duraznos. En boca, el intenso dulzor es equilibrado por una especial acidez propia de los tardíos que han tenido que soportar el invierno.
Un blanco ideal para disfrutar con deliciosos quesos picantes tipo reblochon o con moho exterior, de la onda camembert oloroso, con 91g/l de azúcar pero sólo 12,5% de alcohol.
Agricultura 4.0: oportunidades y desafíos de la próxima frontera
La irrupción de Big Data, Machine Learning, Inteligencia Artificial, seguramente cambiará nuestra manera de gestionar las empresas y las fincas. La pregunta es vital, ¿cómo nos preparamos para el nuevo desafío?