Compartir

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin
Share on telegram
Share on whatsapp
Share on email

Compartir

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin
Share on telegram
Share on whatsapp
Share on email

Malbec, la “francesa” que hizo boom en Argentina

Se cumplen 165 años desde la fecha en que Michel Pouget portó a nuestro país uvas francesas tintas con el objetivo de mejorar la vitivinicultura local. Con más de 41.300 hectáreas es la uva que puso a la Argentina en el mapa de los grandes vinos del mundo.

Historias de todo tipo color y forma rondan en torno suyo. Que Malbec significaba “mal pico” o “mala boca”, porque no era un vino bueno el que resultaba en la zona de Cahors, de donde es oriundo. Que a la Argentina esta cepa tinta llegó de la mano de un médico, el doctor Malbeck, y que antiguamente las cepas se bautizaban en nombre de quien las portaba. Dicen algunos que otrora le llamaban “la francesa” y que miles de hectáreas de esta vid -que desde el 2000 a la fecha le dio un lugar al vino argentino en el mundo- , fueron arrancadas sin piedad entre los 70 y los 80, porque no tenía valor comercial. Con el desarraigo algunos mugrones de Malbec pre-filoxéricos (material genético de gran valor, porque vinieron de Francia antes de la plaga de la filoxera) se perdieron para siempre. Algunos bodegueros, como Catena Zapata, prácticamente se arrogan el “eureka” de haber visto que el Malbec sería una uva de gran potencial para vinos de alta gama. Otros, como Ricardo Santos, ex dueño de Norton, afirman que la primera exportación de Malbec (sin k) la hizo esta bodega en los 70. Desde Salentein se enorgullecen de haber sido los primeros en poner un Malbec de Valle de Uco en las góndolas. Y Luján de Cuyo sigue afirmando que es “la” cuna del Malbec.
Lo cierto es que hay Malbec en todo el país, y que la cepa de bandera ya ocupa más de 41.300 hectáreas, un 18,7% de la superficie cultivada con vid, con un 70% de crecimiento desde 2006 a la fecha, según datos actualizados del Instituto Nacional de Vitinicultura. Mendoza representa el 85% con 35.300 hectáreas. Luján y Valle de Uco se reparten el 65% de esos viñedos.
Abanderado de los envíos a otros mercados, el 62% de los vinos Malbec que se producen en Argentina se exportan; el 94% es malbec puro, pero también hay un poco de blends (malbec con otras variedades). Sin embargo, los llamados “single vineyards” o malbec de viñedos únicos siguen siendo la estrella, y los más demandados por los mercados internacionales. A la cabeza, nuestros compradores son Estados Unidos, Reino Unido y Canadá. Más atrás, Brasil, Alemania, México, Países Bajos y China.

17 de Abril, día mundial del Malbec
Era necesario dar algunos números para fundamentar la existencia de un día mundial del Malbec. Wines of Argentina, la entidad que promomciona el vino argentino en el exterior, inventó esta fecha para incentivar la difusión del Malbec a partir de una efeméride; la creación de la Quinta Normal y Escuela de Agricultura, la primera de América Latina. La propuesta fue de Domingo Faustino Sarmiento desde el exilio, pero fue el enólogo Michel Pouget, quien según se dice trajo desde Francia la cepa malbec, presentó a la Legislatura el 17 de abril de 1853 el proyecto de ley para que se estableciera en la provincia una Quinta Modelo y una Escuela de Agricultura.

Cinco Malbecs que no podés dejar de probar
Si querés conocer el varietal, en Mitre Mendoza recomendamos cinco vinos 100% Malbec que muestran el potencial de la variedad con distintos tipos de elaboración y en diferentes zonas.
– Doña Paula Estate MALBEC (Mendoza, Valle de Uco) El Malbec Doña Paula Estate 2017 es 100% malbec y está elaborado con un 90% de uvas provenientes de Gualtallary y un 10% de Altamira, ambas fincas a gran altitud en Valle de Uco. El vino tiene una guarda de 12 meses en barrica; de color violeta intenso, en nariz se perciben frutos negros, especias y también notas minerales y de grafito. En boca, se expresa fresco con buena concentración, estructura y persistente final. El Doña Paula Estate Malbec 2017 va bien con un bife de chorizo, mantequilla de chimichurri, papas fritas con hierbas, y tomates asados.

Trivento Golden Reserve Malbec (Mendoza, Luján de Cuyo) De un antiguo viñedo ubicado en esa zona Con 15 cosechas logró una identidad y estilo propio de la mano de su enólogo, Germán Di Cesare. En este vino se pueden percibir aromas a frutos rojos, cáscara de nuez y ese toque mineral que da la piedra, a lo que sigue un cuerpo voluminoso y un ajustado y jugoso final. Para lograr estos maravillosos descriptores el vino descansa 12 meses en barrica de roble francés y 12 meses en botella.

Luigi Bosca Malbec Terroir Los Miradores (Mendoza Valle de Uco) Finca Los Miradores, en un viñedo de 10 años de antigüedad que produce menos de 5mil kilos por hectárea; Un tinto intenso, de aromas expresivos que recuerdan a guindas maduras, frutas negras y violetas. Su entrada en boca es vibrante, frutada e intensa, de textura redonda y taninos dulces. Muy buen carácter, algo especiado y con una acidez equilibrada que le aporta frescura. Final largo, profundo y elegante. Se recomienda beberlo a 17 grados y decantarlo una hora antes de servirlo.
Tapiz Reserva Malbec (Mendoza, Valle de Uco) Nació en un viñedo único de San Pablo, a 1350 metros sobre el nivel del mar, donde las noches frías obligan al Malbec a concentrar en sus hollejos gran cantidad de polifenolos que, tras la fermentación, se convertirán en aromas, colores y estructura. Tapiz Reserva Malbec pasa 10 meses en barricas de roble de primer y segundo uso, que ayudan a su dulzura y redondez. Es un Malbec de vibrante rojo violáceo. Intenso aroma a frutos rojos y negros como la grosella, frambuesa y ciruela, bien acompañados con delicadas notas florales. Su paso por roble aporta notas a vainilla, chocolate y café tostado en equilibrio con la fruta. En boca es amable, con taninos maduros y dulces.

Pyros Barrel Selected (San Juan, Valle del Pedernal) Nace como resultado de la visión de Myndert Pon, fundador de Bodegas Salentein. Expresa las excepcionales condiciones del terruño enmarcado entre la Sierra de Pedernal y la precordillera de los Andes a 1400 metros de altitud. Los suelos calcáreos de origen geológico prehistórico, las temperaturas frías y la gran amplitud térmica, dan origen a una nueva expresión de vinos argentinos de clase mundial. Es un malbec diferente con taninos de textura fina, fruta roja expresiva, notas minerales, excelente acidez y largo en boca.