Dom Pierre Pérignon, monje benedictino de Hautvillers (región de Champagne), que estaba a cargo de la producción de vino en esa abadía, probablemente no supo el alcance de liberar al genio de la botella allá por 1693, cuando bebió vinos que, por agregarle azúcar, habían hecho una segunda fermentación en botella. «Hermanos, venid a beber, que con él se ven las estrellas» es una frase que se atribuye al querido monje.
Tras el lockdown del Covid 19, donde su consumo cayó a niveles históricos, las burbujas recuperaron terreno rápidamente, en Argentina y en todo el mundo, siendo en todos los casos el espumoso la categoría que más creció a nivel mundial en ventas.
Los datos de mercado interno de los primeros 8 meses del año (INV) revelan un aumento del 26,2% en el despacho de espumosos en Argentina, con más de 23 millones de litros comercializados en ese período.
“Si bien el consumo más fuerte de espumosos en Argentina suele ser durante el último trimestre, sólo durante agosto de este año la comercialización de espumosos en el mercado interno se incrementó en un 68% respecto del mismo mes de 2021”, explica Andrés Heiremans, Gerente General de Bodega Cruzat, y agrega: “Estos números son alentadores para la industria, demuestran que estamos más cerca de la desestacionalización buscada y la demanda está cada vez más afianzada”.
Por su parte, Martín Hinojosa presidente del INV analizó las estadísticas del último año en el que se vendieron 9 millones de litros más de espumoso que en el año 2020. El espumoso dulce fue el de mayor crecimiento (+78%) con un aumento de 5,5 millones de litros.
En términos relativos es destacable el aumento del espumoso frutado (+95%) y espumoso compuesto (+177%).
Hinojosa agregó que “la tendencia de los últimos 12 años indica que el Espumoso Seco va en disminución mientras que el dulce y el compuesto van en aumento en las preferencias de los consumidores”
Exportaciones argentinas de espumosos
En 2021 se exportaron 42.578 hl de Vino Espumoso, por un valor de 17.641.000 dólares. El presidente de INV Martín Hinojosa destacó que “se llegó al récord histórico en el volumen exportado con un incremento del 42,4% con respecto al año 2020”. En lo que va del año los números indican un incremento del 21% en volumen exportado y un 26% de aumento en valor.
Tendencia en los principales mercados
Wine Intelligence revela que entre 2019 y 2022, la cantidad de estadounidenses que disfrutan del vino espumoso aumentó en un 30 %. No solo hay más personas bebiendo vino espumoso, sino que también lo están bebiendo con más frecuencia, y la cantidad de bebedores mensuales de vino espumoso aumentó del 56 % hace tres años al 72 % en 2022. Casi una cuarta parte de los encuestados informó beber vino espumoso al menos dos veces a la semana.
Esta tendencia está siendo impulsada por el cambio de actitud hacia el vino espumoso, ya que la bebida se aleja de la asociación exclusiva con eventos formales y ocasiones especiales, a una que se puede disfrutar en contextos más relajados y con mayor frecuencia. Hay un cambio considerable en el número de bebedores que ven el vino espumoso como una «bebida relajante al final del día» y que podría beberse «con una comida informal en casa».
Perfil del consumidor
En su último análisis sobre los tipos de consumidores de espumosos, Wine Intelligence concluya que los Millenials los que responsables del crecimiento en Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y Australia.
«El crecimiento en la categoría de bebidas gaseosas en los últimos años, y que se ha acelerado en los últimos 12 meses, proviene principalmente del consumidor adinerado urbano menor de 45 años, principalmente las cohortes Millennials y LDA Gen-Z. En contraste con el estereotipo tradicional del bebedor de gaseosas, es más probable que estos reclutas sean hombres que mujeres» indica.
Este grupo más joven, típicamente residente en la ciudad, ha vuelto a abrazar el comercio más rápido que sus pares mayores, y es más probable que acumulen efectivo debido a la falta de viajes y vida social, además de trabajar desde casa. Es más probable que estos consumidores cambien por una mejor calidad y busquen nuevas experiencias con vinos espumosos; también persiste su deseo de buscar productos locales aspiracionales, lo que es un buen augurio para los productores nacionales de espumosos en cada una de estas geografías.
Además de este pantallazo sobre lo que sucede con los espumosos en Argentina y el mundo, te recomendamos a 3 espumosos elaborados con método tradicional más un par de tips para beberlos mejor.
3 Recomendados
Cruzat Naranjo
Se trata del primer y único vino espumoso naranjo del mercado argentino elaborado bajo el método tradicional. Su elaboración está inspirada en técnicas ancestrales para alcanzar una extraordinaria concentración de color, aromas y sabores. 100% Chardonnay.
“Cruzat Naranjo es un vino espumoso obtenido a través de la maceración de uva Chardonnay –provenientes de Luján de Cuyo– fermentado con levaduras indígenas y con sus pieles, tal como se elaboran los vinos tintos: Es un espumante de uvas blancas con alma de tinto”, explica Lorena Mulet, enóloga de Bodega Cruzat, sobre este producto pensado para consumidores curiosos.
Precio sugerido: $3.500.
Luigi Bosca Brut Nature
Está elaborado bajo el método tradicional a partir de uvas Chardonnay y Pinot Noir de viñedos ubicados en Luján de Cuyo y Tupungato. Con un potencial de guarda de dos años, puede tener un color levemente oro si se lo ha dejado esperar, pero la micro oxidación no desmejora en nada su sabor. Es un espumoso delicado, con un paladar sedoso y sutiles notas de frutas blancas y frutos secos con burbujas finas y persistentes. Precio sugerido: $3900.
Bianchi Extra Brut Premium
Elaborado con un 70% de Chardonnay y 30% de Pinot Noir del distrito Las Paredes en San Rafael. Hizo una segunda fermentación en botella y pasó 36 meses de estiba sobre borras. Es un espumoso perfumado, con delicadas notas a pan y almendras tostadas, de boca carnosa, frutado y levemente ácido. Hermosa corona de burbujas finas en la copa. Precio sugerido: $2765.
3 tips para beberlo (y pronunciarlo)
¿Espumoso o espumante?
Pedro Rosell –a cargo del equipo enológico de Bodega Cruzat junto a Lorena Mulet– es contundente en este punto. “Espumante es todo lo que produce espuma: el detergente, el jabón, el caldo al hervir, etcétera. Espumoso es lo que se transforma en espuma, esta es parte de él. Los vinos con burbujas entran en este concepto”, sostiene Rosell, una de las voces más calificadas en Argentina a la hora de hablar de espumosos.
¿Cuál es la copa adecuada?
Los espumosos se sirven habitualmente en copas flauta, de tallo largo y afinadas, pero en los últimos años hubo una gran tendencia a utilizar copas de vino (sobre todo de blancos). Lorena Mulet enóloga de Cruzat hace la siguiente distinción: el uso de cada copa dependerá del estilo del espumoso: “La copa flauta la recomiendo para espumosos jóvenes, gracias a que nos permite apreciar muy bien el ascenso de las burbujas. Y, para espumosos con varios años de guarda o más complejos, recomiendo las típicas copas de vino ya que permiten sentir mejor todos los aromas”.
¿Cuál es la temperatura ideal?
La temperatura ideal de servicio es de entre 6 y 8°. Esto permite disfrutar su frescura y sus aromas, haciendo más placentera la sensación en boca. “Si lo bebemos demasiado frío, vamos a perder capacidad sensitiva en boca”, afirma Andrés Heiremans. En referencia al servicio, remarca: “La copa debe llenarse en dos tramos y hasta 2/3 de su capacidad, así permitimos que afloren mejor sus aromas”.
