Por Florencia Da Souza, especial para El Triunfo de Baco
Bodega Trapiche invitó a un grupo de periodistas a su nuevo espacio de cocina en Maipú para degustar un menú sin fisuras y planificado por expertos: la sommelier Paz Levinson y los chefs Marcelo Di Giácomo y Chiho Kanzaki.
La conjunción de productos autóctonos reinterpretados por expertos internacionales, el aporte de los cocineros anfitriones y las distintas líneas de vinos de la casa en cada paso lograron, sin dudas, el Blend Perfecto.
Tal fue el nombre para denominar una serie de cenas que organizó Bodegas Trapiche junto a la sommelier Paz Levinson. Los chefs invitados a la noche en Espacio Trapiche fueron Marcelo Di Giácomo y Chiho Kanzaki, dos talnetosos que hoy junto a Paz Levinson, son los dueños del restaurante parisino Virtus, un logro propio luego de haber trabajado en la cocina de Mauro Colagreco, con dos estrellas Michelín.
Distintos pasos –algunos elaborados por los chefs locales y otros por los invitados-, pero siempre con productos de la región y absolutamente de estación fueron maridados con los vinos de alta gama de Trapiche y Costa & Pampa. En su totalidad, el menú y los vinos combinados fueron motivo de estudio y degustación previa para luego ser servidos ante el grupo de invitados, en su mayoría periodistas locales y nacionales, entre ellos, Elizabeth Checa.
Con respecto a la elección de los productos, Marcelo Di Giácomo, que hace 8 años se radicó en Francia, comentó la importancia de esta tarea y su forma de trabajo: “En la cocina de Virtus trabajamos el producto y el vino. Para nosotros es muy importante el maridaje. Entonces, trabajamos el producto de temporada y la carta sale en el mercado. Vamos a la mañana al mercado, vemos, elegimos, compramos y luego ejecutamos. De esta manera, hemos trabajado aquí, esta noche”, agregó el argentino, que luego de trabajar en Buenos Aires junto a Jean Paul Bondoux y aprender lo básico de la cocina francesa decidió ir a París en busca de nuevos aires.
Los pasos en Espacio Trapiche
Por sólo nombrar algunos, se sirvió un Trapiche Medalla Blend 1996 con molleja de corazón, lentejas y salsa vin jaune (un vino típico de la zona de Jura en Francia); y un Trapiche Terroir Series Finca Orellana 2011 con el lomo cocido a baja temperatura, polenta, nabos y chimichurri de maíz. Ambos platos, con sus recetas originales, son favoritos de Virtus en la capital francesa.
En tanto, los anfitriones de la casa, sedujeron con su rissotto frío de hinojos con aire de arvejas y su mousse cítrica con peras y emulsión de limón que se degustaron con un Trapiche Costa & Pampa Sauvignon Blanc 2014 de Chapadmalal.
El postre también fue compartido por ambos equipos de cocina y Espacio Trapiche presentó su pomelo infusionado con tomillo y Virtus, un bizcocho de malbec Trapiche con crema de reine de praie. El Fond de Cave Reserve Encabezado de Malbec 2012 fue el vino que acompañó los paltos dulces.
Luego de seis exquisitos pasos, el chef Marcelo Di Giácomo dijo a los invitados que está convencido de que “la cocina es cien por ciento concentración y pasión por lo que uno hace; sino no se puede llegar nunca a lograr nada” .