Por Gabriela Malizia
El futuro del vino en Estados Unidos sigue siendo muy incierto. El lunes la Casa Blanca confirmó la aplicación de un arancel del 15% a los productos vitivinícolas europeos. En las últimas semanas, Estados Unidos ha ido perdiendo interés por los vinos y espumosos europeos, y se detecta una tendencia a la baja en las compras.
En paralelo, se estima que ganarán peso los productores del nuevo mundo, los que, por el momento, no se han visto afectados por las medidas del presidente estadounidense.
Sin embargo, y antes de cantar «victoria» es importante analizar varias situaciones tanto a favor, como en contra, para Argentina en este cambio de escenario. Sobre estos temas hablamos con el director del Observatorio Vitivinícola Argentino (OVA), quien hace poco presentó públicamente un informe sobre cómo podría impactar en el vino de nuestro país un arancel 0 frente al 15% que ahora pagan los europeos.
En primer lugar Rada aclara que es necesario ver la foto completa, antes de hablar de que las mayores tasas de Trump darán oportunidad a los vinos de Argentina. «No podemos analizar esto tan livianamente, las tasas tienen implicancias en la economía macro de Estados Unidos, con efecto inflacionario lo que tendrá inmediato impacto en la demanda de todos los bienes, inclusive el vino, y por tanto se espera una baja en consumo interno».
Otro tema importante es que hoy el 80% del vino importado que llega al país del Norte es europeo, con consecuentes tiendas y cadenas de distribución ligadas directamente a este circuito. Por tanto, no se sabe cuántos de estos distribuidores estarán interesados en sustituir el vino europeo en góndolas por vinos del Hemisferio Sur, «tampoco podemos ser tan optimistas» indicó.
Con este cambio en las reglas del juego, además, otros destinos, como Brasil y el mismo Reino Unido y Canadá, que son mercados importantes para el vino argentino, tendrán mayor competencia: hay que mirar de cerca lo que hace España que es un gran competidor tanto en el fraccionado como en el granel, con precios bajos.
«Por otro lado, habrá un cierre de mercados. Se espera que la Unión Europea lo haga, así como el resto de los mercados que se vean afectados por estas medidas de Estados Unidos; «habrá menos venta y más competencia, en esta guerra el resultado es perder – perder» vaticina Daniel Rada.

Aranceles sólo para la UE, ¿o también para Argentina y el Mercosur?
Todas las esperanzas están puestas en el potencial acuerdo arancelario en el que trabaja el equipo económico de Javier Milei. Aunque todavía se negocian algunos puntos relacionados con productos como acero y aluminio, se espera que los aranceles para productos argentinos queden fijados entre el 0% y el 10%.
El vino argentino gana siempre y cuando el arancel quede en 0%, pero si se toca, en favor de otras posiciones arancelarias, preocupa a la industria que se toquen los aranceles actuales que son bajos. En este momento Argentina paga 0.063 centavos de dólar por litro de vino fraccionado, lo que es poco más del 1% del promedio de un litro de exportación. En tanto, el espumante paga 0,19 usd por litro y el granel 0,14 usd dólares por litro.
«Con Argentina Estados Unidos tiene saldo comercial positivo, la mitad del comercio de Estados Unidos es con Canadá, México y China, si le sumamos la Unión Europea es el 70% del comercio de este país, con lo cual Argentina no le mueve en absoluto la aguja a EEUU, si bien ellos quieren buscar flexibilizar condiciones con los demás mercados, Argentina no tiene mucho para hacer individualmente» explicó Rada.
Las negociaciones, si bien en otro momento hubieran estado impedidas por el Mercosur, hoy pueden realizarse desde el país gracias al cambio que impulsó la Cancillería Argentina en abril de este año, justamente ante el desafío que presentaba la amenaza de cambios arancelarios en EEUU.
A instancias de la Argentina, el Mercosur (MS) acordó este año ampliar de 100 a 150 las excepciones a su arancel externo común (AEC), que promedia 12% (y tiene un tope de 35%), con las cuales cada país miembro podrá negociar preferencias arancelarias específicas con Estados Unidos, con la autorización de los otros tres. También permitirá mejorar la competitividad al abaratar la importación de insumos y bienes intermedios.
Cómo está el mercado de EEUU en relación al vino
Según datos de las aduanas de Estados Unidos en el mes de mayo de 2025 cayeron las importaciones de vino a Estados Unidos, tanto en términos de valor (-16,8%) como de volumen (-5,4%), situándose en 449,5 millones de euros (-90,9 millones) y 100,1 millones de litros (-5,7 millones). La caída, sin embargo, no fue generalizada. Tanto en términos de valor como de volumen, los países más afectados fueron los europeos, es decir, Italia, Francia, España, Portugal, Alemania. Mientras tanto, durante el mismo período aumentaron las de otros países como Nueva Zelanda, Australia, Chile o, en menor grado, la Argentina.
Según los datos de la OIVE, los primeros cinco meses del año, Francia e Italia lideran el ranking en valor, con 1.088 millones de euros (+25,8%) y 886,1 millones de euros (+4%). Sin embargo, les sigue Nueva Zelanda, con 213,5 millones de euros (-12,6%), que a pesar de la pérdida de precio, sigue siendo el tercer país que más exporta a Estados Unidos. España ocupa la cuarta plaza en valor, con 139 millones de euros y caída del 4,4%, tras un mes de mayo negativo. Paralelamente, entre los principales proveedores de vino a Estados Unidos en valor, además de Francia e Italia, aumentaron Argentina (+1,3%) y Chile (+2,3%), cayendo el resto.
En términos de volumen, es Italia el principal proveedor de vino a Estados Unidos, con 156 millones de litros (+8,4%), seguido de Francia, con 85,6 millones de litros (+19,2%). En este caso, España ocupa la séptima posición con 28 millones de litros (+6%). Crecieron, además, Australia (+7,3%), Nueva Zelanda (+13,2%), Chile (+9%) y Argentina (+4,7%). En el lado negativo, destaca Canadá (-32,5%), aunque se mantiene como tercer proveedor en volumen con casi 67 millones de litros.