Con casi 3.500 hectáreas implantadas con vides, la Patagonia vitivinícola está conformada hoy por tres provincias, Neuquén, Río Negro y Chubut. La marca Patagonia, además, llega hoy con sus vinos a 127 países, y es un sector económico en franco desarrollo.
Durante la última edición virtual de Vinos de Patagonia, una feria organizada por Javier Menajovsky, que reúne algunos de los mejores exponentes del vino y la gastronomía del Sur argentino, pudimos dialogar con varios de los protagonistas y sentir, sobre todo, el entusiasmo y el cariño que vuelcan en lo que hacen, en territorios muchas veces difíciles e inexplorados.
Chubut y las viñas más australes del mundo
Chubut cuenta con los viñedos más australes del mundo, más allá del paralelo 45, latitud sur (Sarmiento). Tiene un total de 129 hectáreas, pero los viñedos son muy chiquitos, en promedio 2 hectáreas, lo que hace un total de 66 viñedos en la zona, en la que hay también 8 bodegas elaboradoras.
En el año 2020 se produjeron 1268 qq (126,800 kg) de uva y se comercializaron 76 hectolitros, todo para mercado interno.
Entre las principales variedades cultivadas se cuentan Pinot Noir, Chadonnay, Merlot, Malbec y Torrontés, con prevalencia de las uvas tintas que ocupan el 58% de la producción.
Nuevos oasis como Trevelin, Paso del Sapo y Sarmiento se están desarrollando rápidamente. La latitud de Sarmiento es la misma que la de Lyon (Francia) y casi la misma que la del centro de Otago (Nueva Zelanda).
Los productores pioneros cultivan Chardonnay, Pinot Noir y Sauvignon Blanc, debido a los veranos cortos.
Los fuertes vientos y las heladas (tempranas y tardías) son la principal amenaza en el área.
Trevelin, un pueblo de ensueño
Una mención aparte para el pequeño pueblo galés de Trevelin, a sólo 22 km de Esquel, donde están algunos de los productores más conocidos de Chubut como Otronia (de Grupo Argento), Casa Yagüe, Contra Corriente y Nant y Fall.
“En agosto del año pasado Trevelin fue certificado como Indicación Geográfica por el INV. “Es el reconocimiento a la reputación que tienen los vinos de este valle donde los mini productores con gran esfuerzo están posicionando la región en el mundo”, comentaron durante la presentación.
Contra Corriente y Viñas de Nant y Fall fueron pioneros en la producción de vino en esa región, con un clima muy adverso. “Tenemos todo en contra, por eso el nombre de nuestro proyecto”, bromeó Sofía Elena a cargo de los vinos de Contra Corriente. “Estamos aprendiendo que lo que obtenemos es especial, creemos que con el tiempo este lugar producirá grandes vinos de Argentina. Hoy la gente busca estos vinos con personalidad y lo estamos logrando en la región”, recalcó.
Por su parte Sergio Rodríguez de Nant y Fall contó que las primeras vendimias se hicieron hace 6 años, cambiando la fisionomía de un pueblo que antiguamente sólo se conocía por el ganado, las pasturas y su famosa torta negra galesa.
Río Negro busca un futuro sustentable
Río Negro tiene 1.600ha cultivadas y produce 5 millones de kilos. En el año 2020 sus ventas al mercado interno fueron de 14.440 hectolitros.
Guillermo Barzi propietario de Humberto Canale, una bodega que cumplió 111 años, enfatiza que la zona es atractiva y está siendo potenciada por los inversores. “Hay mucho dinero invertido en energía sustentable, sobre todo en la tecnología para aprovechar el sol y el agua”.
Eduardo del Río, de Bodega Del Río Elorza, comentó que prácticamente el 90% de la producción de vinos de Alto Valle de Río Negro se exporta. “Estamos en mercados muy competitivos, con muchas satisfacciones en ferias y concursos. Ahora estamos tratando de participar más en mercado local” comentó.
A su vez Ariel Render de Bodega Trina en río Colorado al norte de Río Negro, -una zona que se reflotó – comentó que los parrales antiguos, que fueron abandonados por mucho tiempo, han dado grandes sorpresas una vez injertados, por los diferentes tipos de suelo que tiene el lugar. “En este lugar es muy fácil ser orgánico y biodinámico porque hay mucha sanidad”, aseguró.
Neuquén: el objetivo es exportar más
Actualmente la provincia cuenta con 11 bodegas, 43 elaboradoras de vino casero y artesanal, y 1768 hectáreas plantadas, distribuidas en 95 viñedos.
El 90 % de la superficie se encuentra concentrada en el departamento de Añelo, distribuida en 41 viñedos entre las localidades de Añelo y San Patricio del Chañar, el 10 % restante distribuido en los departamentos de Confluencia, Picún Leufú, Chos Malal, Collon Curá, Pehuenches, Picunches, Lacar y Ñorquin.
Allí las principales variedades que se trabajan son Malbec, Cabernet Sauvignon, Merlott, Pinot Noir y Chardonnay, con las tintas a la cabeza (84,9% ) frente a las Blancas: 14,8% y a las Rosadas: 0.3%
San Patricio del Chañar ubicada a 60 km al noroeste de la capital de Neuquén (en el departamento de Añelo) es el epicentro del vino, con una producción en 2020 de 89.556 qq (8.955.600 kg) de uva y 58.145 hl (5.814.500 litros) de vino.
Julio Viola (hijo) propietario de Bodega Mallma, calificó a la Patagonia vitivinícola como “tierra de locos” por sus condiciones extremas. “A nosotros nos tocó ser los locos de San Patricio de El Chañar, en medio de la Barda encontramos la vieja zona productiva de peras y manzanas, allí mi padre tuvo la visión de colocar viñedos. 20 años más tarde logramos un terruño exuberante, tenemos sol, el frío y el viento, que generan vinos únicos, con viñedos asentados e identidad marcada, vinos de estructura, color y mucha acidez natural, además de sanidad”.
De producciones pequeñas que no superan los 14mil kg por hectárea Rubén Patritti, de la bodega que lleva su apellido, señala que lo difícil para las bodegas de Patagonia es insertarse en los mercados internacionales; con el fin de exportar más se creó Wines of Patagonia, para aumentar los despachos a mercados externos que en 2020 fueron de 9697 hectolitros y usd 5.288,000
Hoy los principales destinos de exportación de vino de Patagonia son Estados Unidos, Brasil, Reino Unido, Alemania y Dinamarca.
