Por Gabriela Malizia
En una semana el mercado de uvas que se mantenía quieto, comenzó a registrar movimiento y precios al alza impulsados por el operativo de compra de uvas que lanzó el Gobierno de Mendoza, el pronóstico de cosecha dado a conocer por el INV que anunció 19,5 millones de qq. de producción total en el país, lo que representa una merma del 13% respecto de la cosecha 2021, que fuera de 22,2 millones de qqy la Mesa de Concertación en la que industriales y productores se vieron la cara.
Matías Manzanares secretario general de la Asociación de Viñateros de Mendoza aseguró que la expectativa por la uva criolla (la base de la pirámide) pasó de $25 a $33 en sólo unos pocos días. Algo similar pasó con las tintas de zonas Norte, Este y Sur por las que hoy se ofrecen $48. El caso del Malbec se analiza en párrafo aparte, ya que los contratos están muy ligados a la zona y al tipo de vino que se elabora, Valle de Uco por ejemplo pide precios 50% superiores a los del año pasado, situando el kilo a unos $90- 100 mientras que en zona Este los productores están pidiendo alrededor de $65 por un Malbec productivo.
Manzanares, admite que las bodegas están muy preocupadas por los incrementos en el precio de la uva, ya que las condiciones de mercado no mejoran.
“Entendemos la preocupación pero esos valores los calculamos en base a costos de producción que publica el INTA y los prorrateamos con la estimación de cosecha que hacen nuestros ingenieros, haciendo cálculos de producción, porque no es lo mismo un rendimiento de 350 qq a los 200 qq por hectárea que tuvimos este año con los grandes problemas climáticos que hubo. El granizo lo podés tenerlo asegurado, pero hay mucha uva media verde, no maduró debido a las contingencias climáticas, heladas, viento zonda, por tanto el costo es mayor. Ahora si empezás a analizar el mercado, si hay una merma del 14% y analizás el bajo stock vínico de 4,5 meses (muy bajo) será mayor la demanda y eso está tirando a que el precio suba”.
Manzanares coincide en que si bien en las blancas algunos están cosechando más kilos, al final en uvas como el Chardonnay y el Sauvignon Blanc, por las que el año pasado se pagaron precios elevados por escasez, estará este año en los mismos niveles. Sin embargo la pérdida se está viendo de forma muy fuerte en la criolla en y en otras uvas como el Syrah, aunque todavía es temprano para hablar de las tintas..
La demanda definirá el precio, dicen bodegueros
Desde Bodegas de Argentina, su presidenta Patricia Ortiz, entendió que si bien hay un pronóstico “todavía falta”, “tendremos que ver la demanda del mercado porque el consumo interno cae y si bien el mercado externo creció el año pasado, cuando sumamos todo y sumamos graneles, vemos que la demanda cae al igual que la participación mundial de Argentina”.
Aseguró en este sentido que “no hablamos de precios dentro de la Cámara, cada empresa maneja sus contratos de acuerdo a la región y la calidad, nosotros no somos formadores de precios. Además, la merma es muy variable, algunos productores tienen más que el año pasado, otros perdieron la mitad de su producción”.
A la hora de hablar sobre lo que viene sucediendo en los últimos años en cuanto a la producción de uva, indicó que “es muy baja la productividad en Argentina, tenemos viñedos muy viejos sobre todo en zona Este, al no tener uva de calidad, tiene bajo precio y al tener bajo precio no se hacen inversiones, esos viñedos van perdiendo productividad, tenemos un problema estructural de viñedos y un grave problema con el agua, donde falta inversión en infraestructura”.
Desde Bodegas de Argentina se muestran más preocupados por el tipo de cambio planchado y por la falta de acuerdos comerciales del país, que por el precio de la uva. Un informe del marco competitivo realizado por la entidad enfatiza que son más de usd 36 millones los que pagan los vinos argentinos para llegar a los mercados en aranceles (un 5% del valor de las exportaciones) sumados al 4,5% de retenciones.
Por su parte, el sector del vino a granel analiza con preocupación el pronóstico de cosecha de uva dado a conocer esta semana por el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) .
“Entendemos que el pronóstico de cosecha conllevará a un ajuste de precios en la uva, pero somos conscientes como sector industrial que el mercado no puede pagar grandes aumentos”, explicó el gerente de la Cámara Argentina de Vinos a Granel Alejandro Ballarini.
“El año pasado por ejemplo, la uva Malbec actualizó su precio un 100%, es decir, más del 40-45% que marcó la inflación anual en el país. Sabemos que el precio venía caído de años anteriores, pero los aumentos abruptos tienen consecuencias negativas en los mercados. Salir a justificar aumentos en dólares ante los compradores extranjeros es imposible por la fuerte competencia de los demás países vitivinícolas” dijo.
“El precio de la uva conforma el 67% del costo del vino varietal y el 80% del vino genérico cuándo se trata de graneles, no hay muchas variables de costos que podamos trabajar desde lo interno: un 8% es la energía, otro 8% son los insumos y el resto es mano de obra; estos tres últimos también aumentan y no se pueden financiar” explicó Ballarini.
