Por Ing. Agrónomo Pablo MInatelli – Especial para El Triunfo de Baco
La Próxima Frontera: Agricultura 4.0 ofrece enormes oportunidades. Ingresar a la digitalización de las fincas supone un proceso enfocado en la eficiencia Técnica, Operativa, Institucional. La irrupción de Big Data, Machine Learning, Inteligencia Artificial, seguramente cambiará nuestra manera de gestionar las empresas y las fincas. Sin embargo, los algoritmos que subyacen en esas tecnologías se alimentan de datos, y las organizaciones deberán adaptarse a un nuevo paradigma donde el conocimiento será parte de un ecosistema colaborativo. ¿Cómo nos preparamos para esta nueva frontera?, es la pregunta tasita que nos hicimos quienes participamos del encuentro.
La convocatoria de InnovaFruit: tierra fértil para el debate
“La Próxima Frontera: Agricultura 4.0” fue el titulo elegido para la convocatoria de InnovaFruit -liderada por el Ing. Agr. Alain Boulet- y del Club AgTech -. Con un panel nutrido de expositores como Ricardo Negri, (Actualmente productor y director de empresas agroindustriales, profesor universitario en el ITBA.); Federico Meyer (Ing. Producción Agropecuaria, MBA y Coach Ontológico profesional. Fundador de Club Agtech); José Cuevas Valenzuela (ingeniero Industrial, MSC. y PhD en Ciencias de la Ingeniería de la Pontificia Universidad Católica de Chile, director ejecutivo de Mumulkan), Melina Giacobbe (Consultora en Innovación Sistémica y en la actualidad se está doctorando en innovación organizacional ecosistémica) y Danilo Drube (Gerente de Producción Tierre de Arandanos – Grupo Marcos Paz Contador – Data Analytics – Managment) se compartieron ponencias y experiencias propias relacionadas con la digitalización del agro.
Por primera vez en la historia de proyección de crecimiento poblacional aparece un escenario de estancamiento: los modelos hablan de un pico poblacional para el 2050, validado por tasas decrecientes de los índices de natalidad. Para ese año, se espera que el Sudeste Asiático, que hoy ya concentra el 50% de la población mundial se “lleve” el 40% del crecimiento proyectado, seguido por Africa, mientras que América del Norte solo participe en un 4%, América del Sur un 7% y Europa contribuya con una participación negativa.
La población urbana a nivel mundial seguirá siendo dominante, pero, a diferencia de otras épocas, la población rural ya ha dejado de crecer, de hecho, se nota una fuerte retracción. Habrá un cambio geográfico de los mercados, y con ello, cambios culturales de consumo y necesidades. 2050 no parece ser tan lejano: un viñedo se diseña para los próximos 30 años, es decir que los proyectos que ejecutemos serán los que busquen esos clientes y entonces deberemos estar atentos a estos cambios.
Mitigar el calentamiento global, medidas paraarancelarias proteccionistas de producciones locales o una combinación de ambas son acciones que los estados impulsaran y que impactaran directamente en todo el ecosistema productivo (un ejemplo es la prohibición de comercializar productos agrícolas en la UE que no demuestren proceder de áreas libres de desforestación). “Los consumidores de alto poder adquisitivo están saturados de propuestas de valor; mientras que los jóvenes están cambiando sus preferencias de compra guiados por criterios ambientales, nutricionales -ya sea por ciencia o por creencia ¿importa?“: valor y precio pueden no ir de la mano.
Surge claramente una mayor necesidad de hacer más con menos. El contexto económico muy volátil, la falta de expertise para el trabajo en las fincas desafían los conocimientos y habilidades existentes. La eficiencia debe ser el concepto que permita aumentar la productividad, DENTRO DEL GRAN PARADIGMA DE LA SOSTENIBILIDAD. Las herramientas que ofrece el Big Data, Machine learning y la Inteligencia Artificial pueden acelerar la transformación. Es necesario advertir que estas tecnologías consumen datos: los algoritmos no son mas que relaciones matemáticas, validadas por sendos procesos estadísticos complejos y por ende los datos deben cubrir la mayor cantidad de variabilidad subyacente. ¿Todo dato es información? Ciertamente no:
- Es necesario ser muy cuidadoso con la calidad, representatividad de los datos y las preguntas que supuestamente esos datos deben responder a través de algoritmos. Quino reflexionaba con Mafalda y Felipe: “Todo sirve para algo, pero nada sirve para todo”.
- Los modelos -algoritmos- por más complejos que sean tienen que poder explicarse, no ser una “caja negra”. Entender el proceso ayuda a interpretar el resultado y en muchos casos, esos resultados dan lugar entonces a nuevas preguntas
- A medida que los algoritmos se vuelven mas complejos y que necesitan cada vez mas datos, pueden surgir problemas de escalabilidad y eficacia computacional que hay que tener en cuenta.
- ¿Serán los algoritmos parte del “nuevo oscurantismo”?¿Como nos aseguramos que el conocimiento generado computacionalmente sea igualmente distribuido?. ¿Quién es el dueño del dato?¿Quien es el dueño del algoritmo?… La ética del dato y del algoritmo… no avanzaremos aquí de este aspecto.
La agricultura 4.0 exige también acomodar nuestra agenda diaria. ¿Cuánto tiempo le dedico a estudiar y conocer la realidad? ¿Cuáles son mis fuentes de datos y de información? ¿Cuánto tiempo dedicamos a la escucha activa -con nuestros clientes incluso nuestros “clientes internos”?¿Generamos el espacio para compartir la visión y encontrar caminos de acción consensuados hacia ella -entendiendo que no siempre lo que quiero es lo que puedo-? ¿Qué tipo de relaciones buscamos? ¿Cómo las “administramos”?.
Los modelos organizacionales deben adaptarse rápidamente a la era del dato y la información subyacente. El conocimiento no reside hoy en la cúpula de las clásicas organizaciones piramidales, sino que está distribuido entre todas las personas que son parte de ella. Es necesario potenciar el trabajo en red -que no es lo mismo que trabajo en equipo-:, cada persona debe tener un rol definido dentro de un gran ecosistema, fortaleciendo los vínculos entre ellas. El proyecto personal debe estar alineado con el proyecto de la organización donde se alternan los éxitos y los errores (de los errores se aprende, quitemos el exitismo de lado).
Como conclusión, no podemos pensar que esta «próxima frontera:» es algo externo a nosotros, donde la robótica nos entusiasma como la solución mágica que resolverá todos nuestros problemas y desafíos. Somos parte de la solución, y la tecnología es una herramienta que nos debe permitir tomar nuestras propias decisiones minimizando la incertidumbre. De lo contrario, Skynet nos arrebatara el protagonismo de ser creadores de nuestro destino.